JERUSALÉN.- El Gobierno israelí aprobó hoy una partida superior a los 140 millones de euros, para un nuevo sistema de defensa capaz de derribar cohetes de corto y mediano alcance.
El prototipo del nuevo sistema, conocido como "Iron Dome" (cúpula de hierro), no estará listo hasta dentro de dos años y medio, y el programa deberá luego pasar un largo número de pruebas hasta alcanzar la versión final.
El presupuesto aprobado será repartido a lo largo de cinco años, informaron fuentes gubernamentales.
Israel afronta desde hace décadas el disparo de pequeños cohetes contra centros urbanos fronterizos, sin que hasta ahora haya logrado inventar un sistema capaz de derribarlo.
Se trata en los últimos seis años de los cohetes Kasam disparados desde Gaza por las milicias palestinas, aunque ya antes, durante la ocupación del sur del Líbano entre 1985 y 2000, tuvo que lidiar con un problema similar con los cohetes Katyusha de la guerrilla libanesa Hezbollá.
En 2006, este grupo islámico disparó más de 4.000 cohetes de corto y mediano alcance contra el sur de Israel, durante la guerra de 34 días que enfrentó a ambas partes tras la captura de dos soldados israelíes.