EMOLTV

Benedicto XVI demanda a los fieles a dar cabida a Dios

Durante la Misa de Gallo el Papa insistió en un tema que ha planteado varias veces, la preocupación sobre un mundo cada vez más laico.

25 de Diciembre de 2007 | 06:43 | AP

CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Benedicto XVI instó a los fieles a reservar en sus vidas un tiempo para Dios y para los necesitados, al celebrar la Misa de Gallo por la Navidad, en las primeras horas del martes, en la Basílica de San Pedro.


Benedicto insistió en un tema que ha planteado varias veces, la preocupación sobre un mundo cada vez más laico, y dijo que muchas personas actúan como si no hubiera espacio para los asuntos espirituales en sus vidas.


"El hombre está tan preocupado por sí mismo, tiene una necesidad tan urgente de todo el espacio y de todo el tiempo para sus propios asuntos, que no deja nada para los demás, para su vecino, para los pobres o para Dios", dijo el Pontífice.


El jerarca católico aprovechó también la homilía para vincular el mensaje de Navidad con el interés cada vez mayor de la Iglesia con el medio ambiente. Mencionó a los primeros teólogos que interpretaron el papel de Cristo también como un sanador de la Tierra y el universo.


"El vino a devolver belleza y dignidad a la creación, al universo: Esto es lo que comenzó en la Navidad y hace que los ángeles se regocijen. La Tierra es devuelta al buen orden por virtud del hecho de que ésta abierta a Dios ... Así la Navidad es la fiesta de la creación restaurada".


En el pontificado de Benedicto, el Vaticano ha adoptado acciones con más sentido ambiental, entre las cuales destaca la participación en un proyecto de reforestación para compensar sus emisiones de bióxido de carbono.


En su homilía en italiano, frente a miles de feligreses que llenaron la basílica, Benedicto pidió que los católicos hagan un espacio para Dios, así como para los menos afortunados.


"¿Tenemos tiempo para nuestro vecino, que necesita una palabra nuestra, mía o que necesita mi afecto? ¿Y para el que sufre y necesita ayuda? ¿Para el perseguido o el refugiado que busca asilo? ¿Tenemos tiempo y espacio para Dios?"


Benedicto trazó un paralelismo entre lo que percibe como un rechazo de la sociedad moderna hacia Dios con la historia de cómo Jesús nació en un establo porque no había espacio para su familia en una posada cercana.


"En cierta forma, la humanidad espera a Dios, espera que esté cerca. Pero cuando llega el momento, no hay cupo para él", lamentó Benedicto.


Navidad


Pero el mensaje del nacimiento de Jesús, que se celebra en la Navidad, señala también que "Dios no permite quedarse afuera", dijo Benedicto. "El encuentra un espacio, incluso si ello implica entrar por el establo. Hay gente que ve esta luz y la transmite a los demás".


Al comienzo de la misa, Benedicto, envuelto en su túnica blanca y dorada, bendijo a
los peregrinos, romanos y turistas al avanzar en procesión por la nave principal hasta el altar central, decorado con flores rojas.


Mientras cantaba el coro, Benedicto echó incienso sobre el altar bajo el gran baldaquino de bronce de Bernini antes de iniciar el servicio en latín con el tradicional "pax vobis" (la paz sea con vosotros), al cual respondieron los fieles, "Et cum spiritu tuo" (y con tu espíritu).


Cuatro niños, algunos en vestimenta tradicional de sus países, colocaron flores cerca de una estatua del Niño Jesús, mientras Benedicto unía su voz a la del coro.


Los que no pudieron entrar a la basílica siguieron el servicio a través de pantallas gigantes en la Plaza de San Pedro, decorada con un árbol de Navidad y un pesebre.


Funcionarios vaticanos develaron el pesebre el lunes, con estatuas de tamaño natural de María y José en una gran estructura similar a una casa. La escena incluía las figuras de cuatro ángeles traídos de México.


Este año se reprodujo la casa de José en Nazaret en lugar del tradicional pesebre de Belén, para destacar la idea de que Jesús nació en todas partes y para todos.


Horas antes de la misa, Benedicto apareció en la ventana de su estudio para encender una vela como símbolo de paz y bendecir a la multitud.


El martes al mediodía, el papa pronunciaba su tradicional discurso "urbi et orbi" (a Roma y el mundo) desde un balcón de la basílica. A continuación, pronunciará saludos a los fieles en más de 60 idiomas.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?