RÍO DE JANEIRO.- Brasilia y sus alrededores entraron hoy en alerta por peligro de fiebre amarilla tras la muerte de varios monos, supuestamente infectados por el virus, en el entorno de la capital del país, informaron fuentes oficiales.
El parque nacional de Agua Mineral, vecino a la capital, donde fueron encontrados dos simios muertos, fue cerrado al público a partir de hoy y por tiempo indeterminado por orden del gobierno del Distrito Federal.
La medida es de “carácter preventivo,” mientras se concluyen los exámenes de las vísceras de los animales que confirmarán o desecharán la presencia de este virus, según informó la secretaría de Salud del Distrito Federal en un comunicado.
El gobierno capitalino anunció un refuerzo de los planos de vacunación, pese a que Brasilia tiene la tasa más elevada del país, con un 95 por ciento de la población protegida.
Además, se está procediendo a la fumigación de las zonas vecinas al parque de Agua Mineral y a la zona residencial de lujo conocida como Park Way, en donde se encontraron otros cuatro monos muertos el pasado día 14 de diciembre, por causas que no se han esclarecido todavía.
Técnicos de la secretaría de Salud están recolectando ejemplares del mosquito Aedes Aegypti, transmisor de este virus y del dengue.En el vecino estado de Goiás ha aparecido un brote de esta enfermedad en por lo menos 31 ciudades.
El gobierno del estado ha confirmado que tres primates murieron por este virus, por lo que se ha iniciado ya una campaña que espera vacunar a 800.000 personas.
El ministerio de Salud envió ayer de urgencia 300.000 dosis de la vacuna, que se juntarán a otras 340.000 unidades que fueron enviadas en diciembre, desde que se detectaron los primeros casos en monos.
La fiebre amarilla es una enfermedad infecciosa que no tiene cura y que es endémica de la región amazónica y de las áreas pantanosas del oeste de Brasil.