MADRID.- Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) confirmó hoy que existe una grabación según la cual la aerolínea Spanair había barajado la posibilidad de cambiar el avión que se accidentó al partir de Madrid el 20 de agosto rumbo a Las Palmas de Gran Canaria.
La información se conoció a través de una nota de prensa después de que Spanair emitiera en horas previas un comunicado asegurando que no había tenido intenciones de sustituir la nave.
En la grabación quedó registrado que el jefe de operaciones de Spanair informó al Centro de Gestión Aeroportuaria (CGA) que "va a haber un cambio de matrícula de la aernoave y, unos minutos después, informa que finalmente no se va a hacer el cambio del avión", señaló AENA.
El comunicado de AENA, que se emitió en respuesta a las declaraciones de Spanair, recoge las informaciones del CGA, que graba sistemáticamente los datos brindados por las compañías aéreas sobre las operaciones que se realizan en el Aeropuerto de Barajas.
La seguidilla de declaraciones al respecto se desató una vez que la ministra de Fomento, Magdalena µlvarez, dijera el viernes durante su comparecencia en una comisión del Congreso de los Diputados que, tras recibir el permiso para despegar, el comandante había decidido regresar al aparcamiento al percatarse de un problema en el sensor que mide la temperatura externa.
Entonces fue cuando la compañía, filial de la escandinava SAS, barajó el cambio de aeronave, pero lo descartó y decidió que el servicio técnico lo revisara, afirmó la ministra.
En respuesta a dichas declaraciones, Spanair emitió hoy un comunicado explicando que cuando el piloto solicitó volver a la plataforma, la compañía informó que había otro avión disponible en caso de que fuera necesario sustituirlo.
La aerolínea hizo hincapié en que tiene entre dos y tres aviones de reserva en sus bases principales para poder operar con la máxima puntualidad.
En el caso del vuelo que despegó el 20 de agosto del Aeropuerto de Madrid-Barajas, la falla detectada no requería el recambio de la nave, ya que se trataba de un problema técnico que podía ser solucionado en 15 minutos.
Spanair señaló que, cuando se detecta una falla, es parte de la rutina de toda aerolínea comprobar inmediatamente si se cuenta con aeronaves de reserva para el caso eventual de tener que sustituir la nave a fin de evitar grandes demoras, procedimiento que fue confirmado por el Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC).
Pero el reemplazo de la aeronave accidentada fue descartado tras detectar el fallo, ya que la demora por la reparación fue de 33 minutos, lo cual no justificaba un reemplazo, aseguró la companía.
En la peor tragedia aérea de los últimos 25 años en España fallecieron 154 personas, la identificación de los restos mortales finalizó en la tarde del viernes, nueve días después del siniestro, al que sólo sobrevivieron 18 personas.
