MOSCU/KIEV.- Este sábado la Unión Europea inició reuniones con Rusia para sellar un acuerdo de monitoreo de gas, destinado a permitir la reanudación del suministro del combustible hacia Europa a través de Ucrania, que fue cortado por días a causa de una disputa contractual.
El Primer Ministro checo, Mirek Topolanek, dijo a su par ruso, Vladimir Putin, que permanecería en la región el tiempo que sea necesario para asegurarse de que el gas sea enviado nuevamente hacia Europa.
El líder checo buscaba acordar con Moscú la creación de una misión de observadores rusos, europeos y ucranianos para que monitoreen los suministros que pasan por Ucrania, a fin de distender los temores de que Kiev esté quedándose con el combustible para uso propio.
La disputa entre Moscú y Kiev condujo al peor corte de los suministros de gas a Europa. Rusia cerró algunas fábricas en el este de Europa y aumentó los temores en la Unión Europea sobre la confianza a futuro en los envíos de gas.
La disputa ha incrementado las tensiones políticas entre Moscú y Kiev, en la que Rusia acusa a Ucrania de corrupción y de robar gas, y Kiev señala que su vecino busca humillarlo. Ambos niegan las acusaciones.