WASHINGTON.- El gobierno del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, "neutralizó" el poder judicial como poder independiente y "vulneró sistemáticamente los derechos de los trabajadores", pero permitió, durante el año pasado, "un dinámico debate público" sobre la situación política, dijo hoy la organización de derechos humanos Human Rights Watch (HRW).
En su reporte anual para el 2008, HRW dijo que Venezuela "carece actualmente de un poder judicial creíble e independiente que pueda actuar como contrapeso del accionar arbitrario del estado y como garante de los derechos fundamentales".
"Ante la ausencia de control judicial", continuó la organización, el gobierno de Chávez "ha debilitado la libertad de expresión de los periodistas, la libertad sindical de los trabajadores y la capacidad de los grupos de la sociedad civil de promover los derechos humanos".
Además, indicó el reporte, los abusos policiales "continúan siendo un problema generalizado" y las condiciones carcelarias "se encuentran entre las más deficientes del continente, con altos índices de mortalidad producto de la violencia entre reclusos".
HRW reconoció que en Venezuela existe "un dinámico debate público, en el cual los medios opositores al gobierno y aquellos afines a él pueden hacer oír de igual manera sus críticas y su apoyo a Chávez".
"Sin embargo, en su intento por influir en el control y el contenido de los medios de comunicación, el gobierno ha realizado actos discriminatorios contra los medios que expresan puntos de vista opositores, ha reforzado la capacidad del estado de limitar la libertad de expresión y ha creado poderosos incentivos para que los críticos del gobierno se autocensuren", criticó el grupo defensor de los derechos humanos.
El informe destacó en este terreno que las autoridades venezolanas denegaron al canal Globovisión, "el único de aire restante que continúa criticando abiertamente a Chávez", la autorización para obtener frecuencias de transmisión adicionales "y se le ha advertido reiteradamente sobre las sanciones que podrían aplicársele por su programación crítica".
"Por el contrario, el gobierno ha concedido frecuencias rápidamente a los canales afines al gobierno que controla o financia", dijo HRW.
"Como nota positiva -destacó el reporte-, cabe destacar que el gobierno ha apoyado en forma activa la creación de estaciones de radio y TV comunitarias, cuya transmisión contribuye al pluralismo y a la diversidad de los medios de comunicación en Venezuela".
Entre otros aspectos, el reporte de HRW, que tiene su base en Washington, dijo que el gobierno de Chávez "ha vulnerado sistemáticamente los derechos de los trabajadores con el propósito de debilitar a los sindicatos existentes y favorecer a nuevos sindicatos paralelos que apoyan su agenda política".