VIENA.- El austriaco Josef Fritzl, conocido como el "carcelero de Amstetten" por haber encerrado a su hija en el sótano de su casa y haberla violado durante años, engendrando varios hijos, comenzará el 16 de marzo.
A Fritzl, que confesó haber mantenido cautiva a su hija Elisabeth durante 24 años en un escondite construido por él en el sótano, le espera una cadena perpetua o una internación preventiva. Según confirmó hoy un portavoz del tribunal en St. Plten, el proceso durará previsiblemente cinco días y tendrá lugar mayoritariamente a puertas cerradas.
Los crímenes del austriaco de 73 años se conocieron en abril de 2008. Fritzl, que tuvo siete hijos con su hija, está acusado, entre otras cosas, de homicidio y secuestro así como de violación reiterada e incesto.
De los siete niños que nacieron, Fritzl dejó morir a uno y luego quemó su cadáver en una estufa. Tres de los niños supervivientes vivieron con él y su esposa desde bebés. Los otros permanecieron con su madre en el sótano hasta su liberación.
La hija de Fritzl y sus seis hijos fueron tratados por psicólogos en una clínica psiquiátrica de Amstetten hasta fines de 2008 y ahora trasladados con destino desconocido con el fin de que puedan iniciar una nueva vida bajo otros nombres.