Dos indígenas se perfilan como rivales de Evo Morales en las elecciones presidenciales

LA PAZ.- Dos indígenas, uno quechua y otro aymara, se perfilan como potenciales rivales de Evo Morales en las elecciones presidenciales de diciembre cuya carrera ya está en marcha, aún cuando no concluye el recuento de votos del reciente referendo constitucional.

Uno de ellos es Víctor Hugo Cárdenas (1993-97), de origen aymara, y el otro el popular alcalde de la ciudad sureña de Potosí, René Joaquino, quechua, ambos declarados rivales de Morales, también de origen aymara.

Cárdenas, quien fue vicepresidente en el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, no rechazó ni admitió su postulación, dijo que no es el momento y su prioridad por ahora es conformar su propio colectivo partidario. Desde ya descartó la invitación del partido que lo llevó a la vicepresidencia en 1993.

Joaquino dijo desde Potosí que ya está al frente de un “proyecto serio y democrático” para participar de las elecciones del 6 de diciembre.

Ambos participaron por separado en la campaña en contra de la Constitución que impulsa Morales de la que dijeron “confronta a los bolivianos” y pone en riesgo la unidad del país.

“Habrá mayor confrontación si se aplica a fardo cerrado”, dijo Joaquino. Cárdenas interpeló abiertamente el proyecto constitucional y postula “un gran pacto económico y social” entre regiones, clases sociales y campo-ciudad.

La fórmula de la oposición pasa por apuntalar a otro indígena capaz de rivalizar con Morales y conquistar el amplio electorado indígena-campesino y a los pobres de las ciudades.

Morales ya descalificó a Cárdenas de quien dijo que fue parte de un “gobierno de derecha” que privatizó las empresas del país en la década pasada, pero no tuvo cuestionamiento contra Joaquino.

El actual mandatario no confirmó su postulación pero sus partidarios dan por descontado ahora que está permitida la reelección con la Constitución que entrará en vigencia en breve.

No son los únicos, el ex presidente Carlos Mesa (2003-2005) fue el primero en apuntarse para la carrera presidencial con un discurso interpelatorio al gobierno.