SIDNEY.- El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, telefoneó este lunes al primer ministro australiano, Kevin Rudd, para ofrecerle su pésame por las 173 muertes ocurridas debido los incendios forestales en el estado de Victoria, en el sur de Australia.
Obama aprovechó la llamada para ofrecer la ayuda de su país en la lucha contra el fuego, que continúa ardiendo y amenazando propiedades y vidas humanas en la región, informó la agencia australiana AAP.
Unos 35 especialistas estadounidenses, entre los que se encuentran jefes de bomberos, jefes de aviación, de planificación y especialistas en rehabilitación de tierras, están preparados para embarcar con destino a Oceanía en cualquier momento, indicó la citada fuente.
AAP aseguró que el lanzamiento de una petición formal de asistencia, requisito indispensable para la salida de los expertos de Estados Unidos, parece inminente.
Una oleada de fuego brotó el sábado pasado en el de sur de Australia, junto a una ola de calor sin precedentes con temperaturas que llegaron hasta los 48 grados centígrados, a lo que se ha sumado en las útlimas horas fuertes vientos que han ayudado a propagar las llamas.
Además de las víctimas mortales, que las autoridades estiman que superarán las 200 en los próximos días, el fuego ha destruido unas 750 viviendas y han arrasado 340.000 hectáreas de terrenos, principalmente bosques.