TEGUCIGALPA.- Cuba "ha dado un paso adelante" al aceptar ser examinada por otros países en temas de Derechos Humanos y al suscribir el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, pero eso supone ciertos deberes para el gobierno de La Habana, dijo este martes el canciller chileno Alejandro Foxley.
"Hemos hecho oír nuestra voz en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas para señalar que Cuba ha dado un paso adelante al firmar este Pacto, pero hay que ser cuidadosos en observar los derechos que ello implica para las personas", declaró Foxley, quien acompaña a la presidenta Michelle Bachelet en una visita oficial a Honduras.
Expresó que la decisión de La Habana de firmar el Pacto de Derechos Civiles y Políticos de la ONU supone "ciertos estándares de independencia del Poder Judicial, de protección de los derechos de las personas que defienden los Derechos Humanos, de protección de los derechos de las personas que están en la oposición política y de una amplia protección de las libertades".
Sin embargo, advirtió que esa declaración de Chile en la ONU no implicaba "condena alguna" a la isla.
"No significa condena alguna. Significa señalar las consecuencias lógicas de un paso que Cuba soberanamente dio. Esto fue expresado en Ginebra ante una delegación cubana y otros países también hicieron esto", dijo Foxley. El canciller, que viaja la tarde de este martes con Bachelet a La Habana en la continuación de su gira, destacó que es "transparente" decirle a los países en la ONU cómo se ve el respeto de los derechos individuales en cada uno de ellos.
"Nos parece que eso es lo más transparente y es lo más franco, en el sentido de decirle a los representantes de otros países cómo se ve el cumplimiento de los derechos individuales, colectivos, personales y humanos, desde el punto de vista de Naciones Unidas", dijo Foxley a los periodistas antes de participar en un encuentro de empresarios chilenos y hondureños, que fue clausurado por Bachelet.
Luego de que Raúl Castro asumió formalmente la Presidencia de Cuba en febrero de 2008, ante la enfermedad de su hermano Fidel, Cuba suscribió el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto de Derechos Civiles y Políticos.