SIDNEY.- El Gobierno australiano quiere adelantar la entrada en vigor de una ley que evite que cigarrillos mal apagados sigan causando incendios forestales como los que este mes han dejado más de 200 muertos en el estado de Victoria.
Camberra anunció hoy que el ministro de Asuntos del Consumidor, Chris Bowen, presionará para que las tabaqueras fabriquen pitillos con un papel especial y aditivos que hace que se apaguen solos, explicó un portavoz del Ministerio.
Una ley aprobada por el Parlamento en 2008 obliga a ello a las empresas a partir de 2010, pero la tragedia de los peores fuegos en la historia del país ha llevado a Bowen a promover un adelanto del proceso.
La Policía australiana sospecha que al menos uno de los incendios, concretamente el situado en la localidad de Bendigo, al oeste de Melbourne y en el que murieron dos personas y se perdieron 50 casas, fue provocado por un cigarrillo mal apagado.