Barack Obama también anunció que el nuevo embajador de EE.UU. en Bagdad será Christopher Hill.
AFPWASHINGTON.- El Presidente estadounidense, Barack Obama, anunció hoy que la mayor parte de las tropas estadounidenses saldrá de Irak para agosto de 2010, así como un acercamiento a todos los países de Medio Oriente, incluidos Irán y Siria.
En un acto celebrado en la base militar de Fort Lejeune, en Carolina del Norte, Obama dejó claro que "para el 31 de agosto de 2010" finalizará la misión de combate en Irak por parte de las tropas de EE.UU.
Según el calendario revelado hoy por el Presidente, tras agosto del año próximo quedarán en Irak entre 35.000 y 50.000 soldados en funciones de adiestramiento, equipamiento y asesoría a las Fuerzas Armadas del país árabe, "en tanto éstas sigan siendo no sectarias".
Este remanente abandonará el país antes de finales de 2011, cuando expira el plazo para la presencia de las tropas estadounidenses según el acuerdo suscrito el año pasado entre Washington y Bagdad.
"Completaremos esta transición para dejar la responsabilidad en manos iraquíes y traeremos a casa a nuestros soldados con el honor que se han merecido", prometió Obama.
Actualmente se encuentran desplegados cerca de 142.000 militares estadounidenses en suelo iraquí.
Según el Presidente Obama, la salida de Irak tendrá como prioridad "la seguridad" de las tropas estadounidenses y civiles en Irak. "Procederemos de manera cuidadosa", precisó.
Habrá "períodos difíciles y ajustes tácticos. Pero nuestros enemigos no deberían albergar ninguna duda: este plan da a nuestros militares las fuerzas y la flexibilidad que necesitan para apoyar a nuestros socios iraquíes y para tener éxito", aseguró.
Al tiempo que se procede a la retirada militar, EE.UU. potenciará sus esfuerzos diplomáticos en Irak, encabezados por el que será su nuevo embajador en Bagdad, Christopher Hill, anunció Obama. Hasta ahora, Hill había sido el principal negociador estadounidense en las conversaciones sobre el programa nuclear norcoreano.
Obama había prometido retirar las tropas de combate estadounidenses en el plazo de 16 meses tras su llegada a la Casa Blanca.
Las fechas anunciadas hoy representan un retraso de tres meses con respecto a lo prometido en la campaña, para atender las preocupaciones de los mandos militares, que temen que una retirada demasiado rápida ponga en peligro los logros obtenidos en la seguridad en Irak.
Obama anunció recientemente el envío de cerca de 17.000 soldados adicionales a Afganistán para hacer frente al deterioro de la situación de la seguridad en el país centroasiático.
El Presidente estadounidense quiere reforzar la presencia militar de sus tropas en Afganistán a medida que disminuye en Irak.
Antes de pronunciar su discurso hoy en Camp Lejeune, Barack Obama telefoneó a su predecesor, George W. Bush, y al Primer Ministro iraquí, Nuri al Maliki, para informarles de sus planes.