PARÍS.- El Museo Nacional de Historia Natural (MNHN) de Francia anunció este lunes que un grupo de investigadores franceses y estadounidenses han descubierto por primera vez un cerebro de 300 millones de años en el cráneo fosilizado de un pez de la familia de los tiburones y las rayas.
Una reconstrucción en tres dimensiones de ese cerebro, también fosilizado y observado gracias a la técnica de la holotomografía por rayos X, muestra "el cerebelo, la médula espinal, los lóbulos ópticos y los nervios", según afirmaron los investigadores en la revista estadounidense Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
El cerebro fue identificado en uno de los raros cráneos de un fosil de un pez hallado en las rocas de Oklahoma y Kansas (en Estados Unidos). Ese fósil pertenece a una especie actualmente extinguida que medía hasta 50 centímetros, cercana a los tiburones y a los peces rata y que vivía en los bajos fondos marinos.
Según el principal autor del estudio, Alan Pradel, del MNHN, la mineralización del cerebro "se debe a la presencia de bacterias que lo cubrieron poco antes de su desintegración, provocando así su fosilización".
El Museo indicó que "este descubrimiento abre perspectivas nuevas en la investigación sobre la evolución de los vertebrados más antiguos (...) y contribuye a completar el rompecabezas de la reconstrucción" del origen de los seres vivos.