ZAMBOANGA.- Tres niños murieron y otros cinco resultaron heridos en el sur de Filipinas al explotar el proyectil de mortero con el que jugaban y que había sido encontrado por el padre de una de las víctimas, informaron hoy fuentes militares.
El accidente ocurrió ayer en el municipio de Buldon, en la provincia de Maguindanao, uno de los lugares que fueron escenario de los enfrentamientos entre el Gobierno y la guerrilla del Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI), en el año 2000.
Los niños jugaban con el proyectil de mortero de 81 milímetros en el interior de un granero de arroz, cuando el artefacto explotó.
El FMLI, fundado en 1984, reanudó la lucha armada en agosto pasado, después de que el Gobierno rompiese el acuerdo que habían alcanzado en junio para dotar de más autonomía a los musulmanes en el sur del país, dentro de las negociaciones de paz.
Casi cuatro décadas de conflicto étnico, religioso y tribal han ocasionado 120 mil muertos en el sur de Mindanao, una de las zonas más pobres del archipiélago.