TEHERÁN.- Irán y China firmaron un acuerdo por valor de 2.600 millones de euros para producir gas natural licuado en el yacimiento de South Pars, al sur del país del medio oriente, considerado uno de los más ricos del mundo.
El proyecto será financiado y ejecutado por un consorcio formado por tres empresas chinas, más un socio iraní, y está previsto que entre en funcionamiento en un plazo máximo de tres años, explicó el director de la compañía de Gas Natural Licuado iraní, Ali Jeirandish.
El directivo detalló a la televisión nacional iraní que se prevé que varias compañías europeas se sumen al proyecto en los próximos tres meses.
Según los expertos, el yacimiento de South Pars -que se extiende desde el sur de Irán hacia el lecho marino del golfo Pérsico-, alberga alrededor del 8% de las reservas totales de gas que existen en el mundo.
Varias multinacionales occidentales, norteamericanas y europeas, han desestimado intervenir en este yacimiento debido a las sanciones internacionales que desde hace treinta años Estados Unidos impone a Irán.
Sin embargo, China, Rusia, La India y Corea del Sur mantienen una estrecha colaboración con Irán en este y otros proyectos relacionados con las energías fósiles.
En enero de este año, la Corporación Nacional China de Petróleo y la Compañía Nacional Iraní de Petróleo firmaron un acuerdo similar por valor de 1.200 millones de euros para explotar el yacimiento petrolero de Azadegan Norte, que posee una riqueza estimada que ronda los seis mil millones de barriles.
Un año antes, la Corporación China de Petróleo y Petroquímica Sinopec y la Compañía Nacional Iraní de Petróleo rubricaron otro pacto para extraer crudo del yacimiento de Yadavaran, situado en la región de Juzestán, en el oeste del país y cuyas reservas probadas ascienden a 17.000 millones de barriles.
Irán es en la actualidad el mayor suministrador de gas licuado a China, país que compra alrededor de un 13 por ciento de sus necesidades de energía fósil a Teherán.