SYDNEY.- Un ex juez de la Corte Suprema australiana deberá ir a prisión por al menos dos años por falso testimonio, informaron hoy medios locales.
El hombre de 69 años se negó durante años a pagar una multa de 77 dólares australianos (52 dólares) por exceso de velocidad y le relató a las autoridades y tribunales cada vez nuevas historias sobre quien conducía su automóvil en 2006.
A veces era una mujer ya fallecida, a veces su madre de 94 años. También su argumento de no haber estado en Sydney en aquel momento fue rechazado por datos de su tarjeta de crédito.
Este viernes el ex juez fue condenado a tres años de cárcel por "falso testimonio intencional y cuidadosamente planeado", y sólo podrá acceder a beneficios después de dos años.