NAPOLES.- Miles de personas marcharon en Nápoles para recordar a las víctimas de la mafia y pedir el fin de la influencia del crimen organizado en el sur de Italia. La manifestación es en una de las más multitudinarias que se han realizado contra el poderoso sindicato del crimen en los últimos años.
Familiares de víctimas, algunos vestidos de blanco y mostrando fotografías de sus seres queridos, lideraron la marcha mientras los nombres de unas 900 personas asesinadas por la mafia eran leídos por altavoces.
Una pancarta decía: "No los han matado. Están caminando con nosotros"."Hoy es un día de celebración porque recordamos nuestros muertos con todos estos jóvenes reunidos aquí. Ellos son el futuro de Italia", declaró Vincenzo D'Agostino, padre de un policía que fue asesinado por la mafia con su mujer e hijo.
La marcha fue organizada por Libera, una asociación de grupos de la sociedad civil implicada en muchas actividades antimafia, como la adquisición de fincas y edificios confiscados al crimen organizado y su utilización para fines sociales, como colegios y centros de rehabilitación antidroga.
La policía italiana ha asestado importantes reveses a la mafia siciliana en los últimos años, arrestando a varios altos cargos mafiosos, como el "capo de los capos" Bernardo Provenzano y su aparente sucesor Salvatore Lo Piccolo en el 2007.
Pero se cree que las cuatro mayores organizaciones mafiosas del país - la 'Ndrangheta de Calabria, la Cosa Nostra siciliana, la Camorra napolitana y la Sacra Corona Unita de Puglia - siguen teniendo que ver aún con una parte importante de la economía italiana.
El ministro del Interior, Roberto Maroni, ha dicho que sólo la 'Ndrangheta, ahora considerado el grupo más poderoso de la mafia italiana, logra 45 mil millones de euros al año a través de su control del mercado del narcotráfico europeo.
Los servicios de inteligencia de Italia afirmaron este mes que la crisis internacional estaba dando a los mafiosos la oportunidad de aumentar su control de la economía, ya que utilizan ingresos de sus actividades ilegales para comprar activos en sectores como el minorista, el turismo y el inmobiliario.