MÉXICO.- Un tribunal federal mexicano exculpó hoy al ex Presidente mexicano Luis Echeverría (1970-1976) de toda responsabilidad en la matanza estudiantil de la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco en 1968, cuando era ministro del Interior, informó el Consejo de la Judicatura de México.
En la resolución elaborada por tres magistrados, "se acreditó el cuerpo del delito de genocidio, no así la probable responsabilidad de Luis Echeverría Álvarez", explicó el Consejo de la Judicatura en un comunicado.
Una fiscalía especial que investigó crímenes contra movimientos sociales cometidos de finales de los 1960 a mediados de los 1980, promovió el juicio por genocidio contra el ex Presidente Echeverría, que en 1968 era secretario de Gobernación (Interior).
La organización Amnistía Internacional condenó esta resolución, a la que calificó de "un síntoma de la incapacidad de sucesivos gobiernos y legislaturas mexicanas, así como de las cortes y procuradores, de mantener y cumplir con los compromisos internacionales en materia de derechos humanos".
"Los graves abusos a los derechos humanos cometidos en el pasado reciente en México continúan ensombreciendo el presente", lamentó Kerrie Howard, subdirectora para las Américas de Amnistía Internacional en un comunicado.
La justicia mexicana ha reconocido que la represión a manos del Ejército de estudiantes que realizaban un mitin contra el gobierno el 2 de octubre de 1968, fue un caso de genocidio, pero con el fallo se exculpó de toda responsabilidad al ex Presidente.
Echeverría, de 87 años de edad, se encontraba bajo arresto domiciliario desde el 30 de noviembre de 2006, pero con esta resolución recupera plenamente su libertad, explicó su equipo de abogados.
En la masacre de la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, ocurrida a 10 días de que en la Ciudad de México se iniciaran los Juegos Olímpicos de 1968, murieron al menos 30 personas, según cifras oficiales, mientras que organizaciones sociales denuncian que fueron cientos.
La fiscalía ya disuelta también emprendió contra Echeverría un proceso judicial por su probable responsabilidad de otra matanza de estudiantes ocurrida en 1971, cuando ya era Presidente, pero también fue exonerado de todo cargo.