MADRID.- España registró esta semana su primer caso de violencia conyugal en un matrimonio de homosexuales con el asesinato en Adra (Andalucía, sur) de un hombre a manos de su marido del que estaba separado, indicaron el miércoles fuentes de la alcaldía local.
La víctima, un español de 34 años, fue hallado muerto tras haber sido apuñalado en el cuello. Su presunto asesino, su marido de origen marroquí del que estaba separado hace dos meses, se suicidó después de matarlo.
La municipalidad de Adra, donde trabajaba la víctima, declarará una jornada de luto por el asesinato, dijo en un comunicado.
Se trata de primer caso oficialmente desvelado en España de violencia conyugal en el seno de una pareja de homosexuales casados, después de la adopción, en junio del 2005 de una ley que autoriza el casamiento entre personas del mismo sexo, medida emblemática del gobierno socialista de José Luis Rodriguez Zapatero.
La asociación de defensa de los derechos de los homosexuales Colegas "lamentó" el miércoles el asesinato en un comunicado, en el que destaca que la violencia conyugal es "desgraciadamente el pan de cada día en muchas parejas de gay y lesbianas", pero "continúa siendo una realidad invisible".
El gobierno socialista español impulsó en los últimos años medidas para luchar contra la violencia doméstica y de género, sin lograr sin embargo reducir el número de muertes.
En 2004, el ejecutivo español logró sacar adelante una ley pionera en Europa contra la "violencia conyugal", que preveía hacerse cargo de las mujeres maltratadas en los ámbitos jurídico, sanitario, financiero, social y sicológico.
La asociación Colegas consideró el miércoles que los homosexuales no están suficientemente protegidos por esta ley y exigió que se aplique "de manera similar" para las víctimas homosexuales.