WASHINGTON.- El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, volvió a criticar hoy, sin nombrarlo, a su predecesor, el republicano George W. Bush, y prometió tomar medidas contra el "despilfarro".
"No es ninguna noticia decir que pasamos por un momento difícil, la peor desaceleración económica desde la Gran Depresión, una crisis crediticia que ha acentuado la desaceleración y una catástrofe fiscal que se viene acumulando desde hace muchos años", dijo Obama durante su habitual discurso radial y en video de los sábados.
Obama recordó que "en el año 2000", cuando concluía la presidencia del entonces Bill Clinton, también del partido demócrata, "habíamos proyectado un superávit presupuestario de billones, y Washington parecía estar camino a la estabilidad fiscal".
"Ocho años más tarde, cuando asumí el mando, el déficit presupuestario proyectado tan sólo para este año era de 1,3 billones", apuntó Obama, sin nombrar a su predecesor.
Según el Mandatario, el futuro de Estados Unidos depende de "desarrollar una economía de nueva energía, controlar los costos del cuidado de salud y asegurar que nuestros hijos vuelvan a contar con la mejor educación en el mundo".
Pero "también depende de que le devolvamos un sentido de responsabilidad y rendimiento de cuentas a nuestro presupuesto federal", dijo Obama, quien se encuentra en Puerto España, la capital de Trinidad y Tobago, para participar de la quinta Cumbre de las Américas.
"Sin cambios significativos para evitar un déficit y una deuda cada vez mayores, iremos por un curso insostenible", aseveró.
En ese sentido, dijo que "en las próximas semanas" anunciará "la eliminación de decenas de programas del gobierno que se ha demostrado que despilfarran el dinero o son ineficaces".
"En este esfuerzo, no habrá vacas sagradas ni proyectos apadrinados", dijo Obama. El presidente destacó que en todo el país "las familias están tomando decisiones difíciles, y es hora de que el gobierno haga lo mismo".