Jefe militar estadounidense afirma que una bomba nuclear iraní sería desastrosa

WASHINGTON.- Las consecuencias de que Irán adquiera un arma nuclear serían "calamitosas" y las grandes potencias deben actuar de manera conjunta para evitarlo, dijo hoy el almirante Mike Mullen, funcionario militar estadounidense de más alto rango.

Las declaraciones del almirante Mullen se dan un día después de que el Presidente de Irán anunciara que el país probó un misil que, según analistas, puede llegar a Israel y a bases estadounidenses en el Golfo, una gran fuente de petróleo para Washington.

Estados Unidos y otras potencias occidentales están preocupadas de que Irán pueda combinar elementos de sus programas de enriquecimiento de uranio y programas de misiles para crear un arma nuclear, pese a que Teherán niega tener estas intenciones.

"Soy alguien que cree que el hecho de que Irán obtenga un arma nuclear es desastroso para la región y para el mundo", dijo Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, a la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado.

"En mi opinión, genera vecinos que se sienten expuestos, deficientes y entonces desarrollan o compran la capacidad ellos mismos", señaló, sugiriendo que la compra de parte de Irán de armas nucleares podría impulsar una carrera de armas nucleares en Medio Oriente.

"La consecuencia negativa, potencialmente, es absolutamente desastrosa", apuntó.

Pero Mullen no sugirió que Estados Unidos debería tomar medidas militares para prevenir que Irán adquiera armas nucleares.

Sus opiniones están en línea con la política del gobierno de Obama acerca de que las grandes potencias deben trabajar juntas para persuadir a Irán de que no continúe con la construcción de la bomba nuclear y detenga la proliferación general de las armas nucleares.

"Grandes líderes, en el plano internacional, tienen que reunirse para detener el crecimiento o las consecuencias negativas a largo plazo para la gente en el mundo serán realmente, realmente trágico y drástico", indicó.

Israel y Estados Unidos no descartaron la acción militar contra Irán, pero el gobierno de Obama adoptó una política de intentar participar diplomáticamente con Teherán para resolver diferencias.

El Presidente Barack Obama dijo el lunes que espera comenzar negociaciones pronto con Teherán, luego de que Irán celebre sus elecciones el próximo mes.