LISBOA/LONDRES.- El pedófilo británico considerado posible sospechoso de la desaparición de Madeleine ya fue descartado anteriormente por la policía portuguesa por falta de pruebas, informó hoy el diario luso "Público" en alusión a fuentes policiales de Lisboa.
El hombre de 64 años fue uno de los 150 delincuentes sexuales que fueron interrogados por las autoridades portuguesas después de la desaparición de la niña británica. Sin embargo, se descartó que el hombre estuviese implicado en la desaparición de la pequeña.
Vivía en el sur de Portugal hace dos años, cuando la niña desapareció poco antes de su cuarto cumpleaños en un complejo turístico.
Actualmente está siendo tratado de cáncer en un hospital de Alemania, según indicó el viernes el "Daily Mirror". Tiene vínculos con este país porque su mujer es alemana.
La policía del condado de West Yorkshire informó que quiere interrogarlo en conexión con hechos ocurridos en 1975, para lo cual se puso en contacto con autoridades alemanas. El británico estuvo en la cárcel en varias ocasiones por delitos sexuales contra niñas.
Según citó el diario "The Sun", en su edición online de este sábado, a una enfermera de la Clínica Universitaria en Aquisgrán, el hombre está demasiado enfermo como para recibir visitas.
El portavoz de los padres de Maddie, Clarence Mitchell, confirmó que el británico "es de interés" para los detectives privados de los McCann, pero destacó que se trata sólo de una de varias pistas que siguen.
El ex jefe de la policía portuguesa, Gonalo Amaral, ha sido condenado, entre tanto, a una pena en libertad condicional de año y medio por falsas declaraciones en relación con otro caso.
Amaral ha tenido que asumir la responsabilidad junto con cuatro policías más por acusar a una sospechosa de maltrato. El caso giraba en torno a la desaparición de otra niña en la costa del Algarve en 2004.
El tribunal consideró demostrado que la madre de la niña de ocho años, Joana, fue obligada a golpes a admitir haber asesinado a su hija. Sin embargo, los jueces no pudieron poner nombre al culpable de los maltratos, debido a que los cinco policías se supuestamente se encubrieron mutuamente.
La madre de Joana y su tío fueron condenados entonces a 16 años de prisión respectivamente por el asesinato de la niña. El cuerpo de Joana nunca fue hallado.
Madeleine desapareció en mayo de 2007 del apartamento donde la familia pasaba sus vacaciones, en Praia da Luz, en la costa del Algarve, mientras sus padres estaban cenando con unos amigos. Estaba a punto de cumplir cuatro años.
La policía portuguesa cerró sin resultados las investigaciones el año pasado. Hace unas semanas los padres hicieron circular un nuevo retrato robot de un sospechoso, así como una nueva foto de Madeleine que muestra cómo se vería con seis años.
El nuevo sospechoso surgió porque una pareja que estaba de vacaciones en Portugal lo vio y dio la alarma. Al parecer iba con su mujer y seis hijos de un cámping a otro haciendo extraños comentarios.
Por ejemplo, dijo que unos "turistas gitanos" le quisieron comprar un niño y que tenía que ir a Marruecos a un "viaje de negocios". Varias veces ha habido rumores de que Madeleine estaba en Marruecos. El hombre ha dicho sin embargo, según el "Daily Mirror", que tiene una coartada para la noche en que la niña desapareció y que es inocente.
En el Reino Unido, los delincuentes sexuales condenados deben registrarse e informar de sus viajes al extranjero, pero al parecer el sospechoso en cuestión no lo hizo, según Mitchell. Ahora, la policía debe decidir qué hace con las nuevas informaciones, añadió.