BERLÍN.- El concepto de rescate para la automotriz alemana Opel está decidido, informó anoche el ministro de Finanzas de Alemania, Peer Steinbrck, tras una reunión de seis horas y media en Berlín.
Steinbrck dijo que la decisión no es tomada a la ligera. Para el Estado implica grandes riesgos, que deberán ser defendidos ante el contribuyente.
La decisión se puede justificar tras las promesas y explicaciones de la empresa de autopartes austro-canadiense Magna. El crédito puente de 2.000 millones de dólares es la última oferta, aseguró el ministro, quien precisó que no aumentará las ayudas.
De esta manera se demuestra que el Gobierno alemán "no es chantajeable", añadió. Además, existe un enorme interés en garantizar el empleo en las cuatro plantas alemanas de Opel.