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Beijing protesta por encuentro entre primer ministro danés y el Dalai Lama

Un portavoz del Gobierno chino exigió a Dinamarca que corrija "sus errores relacionados con el Tíbet y que elimine el impacto negativo" de la reunión para salvar las relaciones entre ambos.

31 de Mayo de 2009 | 01:05 | EFE

BEIJING.- Beijing expresó su descontento por el encuentro privado entre el primer ministro danés, Lars Løkke Rasmussen, y el Dalai Lama líder espiritual y político tibetano en el exilio.


"China está sumamente descontenta y expresa su protesta por los encuentros entre el Dalai Lama y los altos cargos daneses", señaló el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Qin Gang, en un comunicado publicado hoy.


Tanto Rasmussen como el ministro danés de Exteriores, Per Stig Moeller, se reunieron en Copenhague con el lama el viernes.


"A pesar de las protestas formales de China, ellos se reunieron con el Dalai Lama, quien promueve actividades secesionistas, y estas reuniones dañan gravemente los intereses clave de China, las relaciones entre ambos países y destruyen la cooperación amistosa bilateral con Dinamarca", agregó el portavoz chino.


El Dalai Lama se exilió en la India después de que las tropas comunistas ocuparan el Tíbet a finales de la década de 1950, y desde entonces su popularidad ha ido creciendo en el mundo, pero también las tensiones con el gobierno chino, que lo considera un secesionista que busca la independencia de la región.


El portavoz chino exigió a Dinamarca que corrija "sus errores relacionados con el Tíbet y que elimine el impacto negativo" de ese encuentro para salvar las relaciones entre China y el país europeo.


Rasmussen y el líder espiritual se reunieron el viernes, en Mariensborg, la residencia oficial del primer ministro danés, en una reunión en la que evitaron tratar temas políticos, señalaron ambos.


El primer ministro destacó, después de las protestas de la embajada china en su territorio hace dos semanas, que el encuentro fue de carácter privado, para evitar dañar las relaciones bilaterales, algo que le ha costado las críticas de la oposición de izquierdas.

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