TEGUCIGALPA.- El Presidente designado por el Congreso hondureño, Roberto Micheletti, aseguró en una entrevista que su país no va a "negociar nada" con la Organización de Estados Americanos (OEA) para restituir al depuesto Mandatario Manuel Zelaya, porque éste "nunca va a retornar al poder".
"Nosotros no podemos negociar nada", dijo tajante tras el ultimátum de 72 horas que le ha dado la OEA para que restituya a Zelaya en la presidencia del país so pena de ser expulsado del club americano de naciones democráticas, algo que no ocurre desde 1962, cuando fue apartada Cuba.
Ante la condena unánime de la comunidad internacional y la decisión de algunos organismos financieros de suspender la entrega de fondos a Honduras, respondió tajante: "Nosotros tenemos compromisos con nuestro país, no tenemos que hacer arreglos con nadie".
"Si la comunidad internacional considera que hemos cometido delitos, algún error, que nos condene y se acabó. Esto es autodeterminación del pueblo", sostuvo antes de agregar que el 80% de la población está de acuerdo con la decisión de deponer a Zelaya.
"Aquí le vamos a resolver el problema al pueblo como podamos. No se olvide que este gobierno es por seis meses. Una vez que nosotros elijamos nuestras nuevas autoridades ellos (la comunidad internacional) tendrán la libertad de abrirle los espacios a las nuevas autoridades".
Micheletti ha "garantizado" que el 29 de noviembre habrá elecciones generales, como está previsto en el calendario electoral, y el 27 de enero entregará el poder a quien resulte elegido.
Zelaya "nunca va a retornar al poder", sostuvo, y si vuelve al país como ha prometido que hará a partir de este fin de semana, "desde luego que será detenido" para que responda por los 18 delitos que le imputa la justicia hondureña, y que el martes emitió una orden de captura internacional.
"No podemos llegar a un arreglo porque el ex Presidente Zelaya tiene aquí órdenes de captura por delitos que él cometió cuando fue funcionario", dijo tras una ceremonia en la que tomó juramento a nuevos funcionarios de su gabinete en la sede de la presidencia.
El Jefe de Estado depuesto, según Micheletti, "ya fue enjuiciado y eso no le va a permitir retornar al poder", zanjó. Lo que no significa que una vez que "arregle sus asuntos con la justicia", "pueda aspirar a ser diputado del Congreso Nacional o ser alcalde de su pueblo", pues la Constitución actual no permite la reelección presidencial.