WASHINGTON.- El secretario de Justicia estadounidense, Eric Holder, evalúa la posibilidad de designar a un fiscal en lo penal para que investigue las prácticas de interrogación usadas durante el gobierno de George W. Bush, una decisión polémica que podría chocar con el deseo del Presidente Barack Obama de dejar el tema en el pasado.
Holder tomará una decisión final en las próximas semanas, dijo esta noche un funcionario del Departamento de Justicia que pidió no ser identificado porque no está autorizado a hablar del tema.
El vocero del departamento, Matt Miller, dijo que Holder planea "actuar según los hechos y según la ley".
"No hemos tomado decisiones sobre investigaciones ni procesos, incluida la posible designación de un fiscal para profundizar la investigación", dijo. "Como lo ha dejado en claro el fiscal general (Holder), sería injusto procesar a un funcionario que actuó de buena fe usando como base la asesoría legal del Departamento de Justicia", agregó.
La designación de un fiscal con seguridad despertaría rencillas partidarias que podrían generar una distracción de los esfuerzos de Obama de aprobar reformas del sistema de salud y de energía. El Presidente ha mostrado repetidas veces su reticencia a que haya una investigación y dijo que el país debería estar "mirando hacia adelante y no hacia atrás".
La revista "Newsweek", que hoy primero sobre las novedades, dijo que Holder es consciente de las consecuencias políticas de lanzar una investigación y prefería no crearle problemas innecesarios a la Casa Blanca. Aún así, el secretario de Justicia se sentía consternado por las revelaciones acerca del tratamiento de detenidos en las "prisiones negras" de la CIA.
La investigación se centraría en parte en averiguar si agentes de la CIA torturaron a presuntos terroristas después de los ataques del 11 de septiembre de 2001. Holder ha dicho que no se procesará a aquellos que hayan actuado dentro de las líneas de conducta que el propio gobierno les dio. Sin embargo, no eliminó la posibilidad de presentar cargos contra aquellos que se excedieron y violaron la ley.
"Espero que cualquier decisión que tome no tenga un impacto negativo sobre el temario del Presidente", dijo Holder a "Newsweek". "Pero eso no puede ser parte de mi decisión", añadió.