BEIJING.- Un tribunal chino condenó a pena de muerte en suspenso al ex jefe de la refinería estatal de petróleo Sinopec, tras admitir haber aceptado sobornos por cerca de 30 millones de dólares, informaron hoy medios oficiales.
La sentencia a muerte contra Chen Tonghai, jefe de Sinopec hasta su arresto en 2007, fue suspendida porque "devolvió todos los sobornos que aceptó, admitió sus crímenes y entregó información sobre otros delitos", indicó la agencia estatal de noticias Xinhua.
Un tribunal de Beijing determinó que Chen aceptó sobornos por un total de 196 millones de yuanes (29 millones de dólares) desde 1999 hasta 2007, agregó. La corte también privó de por vida a Chen de sus derechos políticos y confiscó su propiedad personal.
Las condenas a muerte en suspenso usualmente son conmutadas por cadena perpetua después de dos años, de haber buen comportamiento.
