CIUDAD JUÁREZ.- Tres cadáveres, uno de ellos decapitado, aparecieron este martes flotando en un canal de irrigación en esta ciudad norteña donde la violencia ha aumentado a pesar de la presencia de miles de soldados.
Un grupo de bomberos extrajo los cuerpos del canal, uno de ellos sin cabeza, y los otros dos con las cabezas envueltas en cinta adhesiva, según un reporte del departamento de bomberos de la ciudad. Los tres tenían signos de tortura, una de las marcas distintivas de la violencia relacionada con el narcotráfico.
El gobierno federal desplazó a 5.000 efectivos más a Ciudad Juárez en un intento por recuperar la seguridad en una de las urbes más peligrosas de México. Los homicidios se detuvieron en un principio, pero repuntaron rápidamente: más de 800 personas han muerto este año, un ritmo similar al del año pasado.
El Presidente Felipe Calderón ha desplegado miles de soldados y policías federales en todo el país para controlar a los cárteles de las drogas, pero la violencia del narcotráfico ha continuado, cobrando más de 11 mil vidas desde que el Mandatario asumió el poder en 2006.
Otro cuerpo torturado, amordazado y colocado dentro de una bolsa de plástico apareció en el estado de Veracruz, en el Golfo de México, informó la vocera de la policía municipal, Laura León. La policía encontró el cuerpo del hombre poco antes de la medianoche del lunes en el municipio de Boca del Río.
Mientras tanto, la armada confiscó dos botes con 8,3 toneladas de cocaína en la costa del estado de Oaxaca, en el Pacífico, según un comunicado difundido el martes.
Cinco tripulantes, tres mexicanos y dos colombianos, fueron arrestados en la operación en Oaxaca realizada ayer, lunes, con la asistencia de autoridades de Guatemala, Belice y Estados Unidos.
