JERUSALÉN.- El nuevo embajador de Israel en Estados Unidos, Michael Oren, negó hoy que exista una crisis en las relaciones de su país con el poderoso aliado, pese a la disputa sobre la construcción de asentamientos judíos en la Cisjordania palestina.
En declaraciones a Radio Israel, Oren admitió que "hay diferencias sobre ciertos asuntos muy específicos", pero aseguró que "el espectro de los contactos, de la cooperación con Estados Unidos es enorme, profundo y vasto".
El diplomático afirmó que para Israel no hay tensiones en la relación con Estados Unidos, al resaltar la "alianza extraordinariamente profunda" entre los dos países.
Oren, un reputado historiador que nació en Estados Unidos, presentó sus credenciales al presidente Barack Obama el pasado lunes.
El nuevo representante de Israel en Washington aseguró que la disputa sobre los asentamientos judíos se resolverá "pronto".
El gobierno de Obama insiste en que Israel debe detener todas las actividades de construcción en los asentamientos.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, asegura que no se construirán nuevos asentamientos ni se expropiarán más tierras en Cisjordania, pero reclama el derecho de seguir construyendo dentro de los asentamientos existentes para absorber el "crecimiento natural" de la población.
El pasado domingo, Netanyahu rechazó la demanda estadounidense de que se detenga inmediatamente la proyectada construcción de más de 20 viviendas cerca del hotel Shepard, en el barrio Jeque Yaraj de Jerusalén.
El gobierno municipal había otorgado al millonario estadounidense Irwin Moskowitz permiso para urbanizar el terreno, que había comprado en 1985.