WASHINGTON.- El Presidente estadounidense, Barack Obama, abordó hoy el planteamiento de una reforma educativa desafiando a las escuelas en todo el país a mejorar sus estándares de educación si quieren participar de más de 4.000 millones de dólares en fondos federales.
Éstos son parte de un paquete de estímulo de 787.000 millones de dólares aprobado en febrero pasado para ayudar a impulsar la economía estadounidense a salir de la recesión.
Unos US$ 100 mil millones del paquete de estímulo están destinados a la educación, gran parte de los cuales van directamente a los presupuestos estatales.
Sin embargo, Obama dijo que se niega a simplemente repartir todos los fondos a las escuelas de forma incondicional. Indicó que 4.350 millones de dólares serán ofrecidos en una competición de "carrera hacia lo alto" designada para estimular reformas específicas.
"Esta es una de las mayores inversiones en reforma educativa en la historia norteamericana. Y más que entregarlo y repartirlo, dejamos que estados y distritos escolares compitan por él", dijo el mandatario en un discurso en la Casa Blanca.