TEGUCIGALPA.- El dirigente campesino hondureño Rafael Alegría denunció hoy que fue detenido por la policía durante alrededor de seis horas en el sitio de Las Manos, fronterizo con Nicaragua.
Alegría dijo a EFE, en comunicación telefónica, que acompañaba a un periodista europeo que se dirigía hacia Nicaragua, donde además tenían previsto comunicarse con el depuesto presidente hondureño, Manuel Zelaya.
Agregó que los policías que lo detuvieron no supieron explicarle por qué lo hicieron, aunque el hecho ocurrió durante el toque de queda que rige en esa región oriental de Honduras a raíz de las intenciones de Zelaya de regresar a su país por el sector de Las Manos.
"Les dije que yo no reconocía el toque de queda porque lo decretó un gobierno ilegal", añadió.
Según relató Alegría, los policías lo trajeron de Las Manos a una posta de la ciudad de El Paraíso, departamento del mismo nombre, y después a Danlí, donde le dejaron en libertad.
Alegría, quien además es dirigente del movimiento internacional Vía Campesina, afirmó que en la posta policial que estuvo detenido había unos 45 hombres y unas 18 mujeres.
Entre esas personas figura un socorrista de la Cruz Roja Hondureña, organismo que no está participando en las manifestaciones que se registran en el sector de Las Manos, porque "ayer se denunció que una ambulancia de la institución estaba siendo utilizada para cargar bombas lacrimógenas de la policía", dijo Alegría.
El dirigente campesino también integra un movimiento de resistencia popular que exige la restitución de Manuel Zelaya al poder, tras su derrocamiento por los militares el 28 de junio.
Alegría, quien dijo que fue liberado por presiones internacionales y la mediación del ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras Juan Almendárez, colaboraba con Zelaya, antes de ser derrocado, en un programa social auspiciado por la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA).
Alegría pernoctó el viernes en el sector de Arenal, El Paraíso, con familiares de Zelaya, entre ellos su esposa, Xiomara Castro, y otros seguidores del depuesto Presidente que iban hacia Las Manos, propósito que no lograron porque fueron retenidos por militares y policías.