TEGUCIGALPA.- El canciller del nuevo Gobierno de Honduras, Carlos López, envió una nota a su homólogo de Nicaragua, Samuel Santos, para reclamar al Ejecutivo de Daniel Ortega su "tolerancia” con las acciones de "provocación y violencia" en su territorio del depuesto presidente hondureño, Manuel Zelaya.
"La tolerancia mostrada por su Gobierno a las acciones de provocación y violencia emprendidas desde territorio nicaragüense por el ex mandatario hondureño José Manuel Zelaya Rosales (...) es inadmisible y contraria a las normas del Derecho Internacional", acusa el documento, remitido hoy si bien tiene fecha del 28 de julio.
Zelaya se instaló el viernes de la semana pasada en la localidad nicaragüense de Ocotal, cerca de la frontera hondureña, desde donde intentó regresar a su país y ha anunciado su intención de organizar una resistencia pacífica al Gobierno de Roberto Micheletti, que lo sustituyó tras su expulsión de Honduras por los militares.
López denunció en la nota que desde territorio nicaragüense el presidente depuesto hace, con el consentimiento de Managua, "llamados a la insurrección, organiza columnas, instala en el Ocotal y Estelí campamentos y cuarteles al igual que bases de operación (...) y se moviliza con la protección de efectivos policiales y militares” de ese país".
Estas actividades han sido duramente criticadas por la oposición nicaragüense.
Según el nuevo canciller hondureño, Zelaya pretende con ellas "generar tensiones en Honduras que deriven en derramamiento de sangre hondureña y una intervención extranjera mayor que la que actualmente desarrollan su Gobierno (de Nicaragua) conjuntamente con el del señor (presidente de Venezuela) Hugo Chávez.
”Además, añadió, busca “hacer fracasar la Mediación emprendida" por el presidente de Costa Rica, Óscar Arias, entre Zelaya y Micheletti.
"Abrigo la esperanza que su Gobierno retome los caminos de la sensatez y que esa injerencia que públicamente he denunciado y protestado cese de manera absoluta,” solicitó López en su misiva al Gobierno nicaragüense.