TEGUCIGALPA.- El presidente interino de Honduras designado por el Parlamento, Roberto Micheletti, dijo que se encuentra "consolidado" en el poder y reafirmó que el derrocado mandatario Manuel Zelaya no regresará al poder, como lo desea la comunidad internacional.
Micheletti dijo que desde el primer día desde que asumió la presidencia se encuentra consolidado en el cargo, al que accedió horas después que comandos militares arrestaron y expulsaron del país a Zelaya.
El mandatario de facto de Honduras habló con la prensa en una ceremonia especial de izada de la bandera hondureña en el palacio presidencial.
Al mediodía se reunió con la comunidad empresarial y sociedad civil de la norteña ciudad de San Pedro Sula, a 250 kilómetros de Tegucigalpa, capital del corazón económico y comercial de Honduras, donde se comprometió a que no hayan actos de corrupción en los pocos meses de mandato.
Micheletti fue designado titular del Poder Ejecutivo para que concluya el mandato de Zelaya, que caduca el 27 de enero del 2010 cuando asuma el nuevo mandatario que surgirá de las elecciones del 29 de noviembre de este año.
En cuanto al futuro de Zelaya, en un comunicado Micheletti dijo que "nunca podrá volver a asumir la Presidencia porque ha declarado fracasada la mediación y la opción negociada" que impulsó el presidente costarricense, Oscar Arias.
Denunció que Zelaya amenaza con "organizar guerrillas desde campamentos en Nicaragua" con apoyos de los mandatarios Hugo Chávez y Daniel Ortega, de Venezuela y Nicaragua respectivamente.
Micheletti se declaró preocupado porque Nicaragua "preste su territorio para que Zelaya prepare grupo armados para atacar a Honduras" y dijo que Tegucigalpa jamás pensó en atacar a Managua.
Mientras el movimiento que apoya a Zelaya continuó su jornada diaria de protestas, paralizando varias avenidas de Tegucigalpa.
Pero los dirigentes del movimiento dijeron que los principales actos de protesta se realizarán el miércoles cuando se concentren en Tegucigalpa y San Pedro Sula simultaneamente.
