WASHINGTON.- Pocos días antes de las elecciones presidenciales en Afganistán, el secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, describió una imagen dispar de ese país asiático.
Mediante algunas operaciones militares en la conflictiva provincia Helmand y otras regiones sureñas, en los comicios del 20 de agosto podrán votar más afganos de lo que hubiera sido posible antes del reciente aumento de tropas estadounidenses, consideró Gates en Washington.
"Evidentemente esto es un desarrollo estimulante", opinó. Sin embargo, dijo que en lo que compete a toda la situación de seguridad hay un cuadro mixto, y explicó que en algunas partes de Afganistán los talibán se establecieron claramente.
Las actuales operaciones militares -entre ellas una nueva ofensiva en Helmand que comenzó a mediados de esta semana- y las acciones sopesadas para los próximos meses apuntan a hacer retroceder a los talibanes y establecer una presencia gubernamental duradera.
Gates indicó que el nuevo comandante de las tropas internacionales en Afganistán, el general estadounidense Stanley McChrystal, está trabajando en un avalúo de la situación. Hasta comienzos de septiembre les dará un informe a Estados Unidos y sus aliados, pero no hará recomendaciones ni pedirá más tropas.
Sin embargo, se le dejó en claro que dispone de libertad "para pedir aquello que precise para cumplir esta importante misión", añadió el jefe del Pentágono.