LA PAZ.- El gobierno del presidente Evo Morales anunció un juicio de responsabilidad a siete de los doce ministros de la Corte Suprema de Justicia de Bolivia que decidieron trasladar de La Paz a Santa Cruz un caso de una banda de mercenarios boliviano-europeos, se informó este sábado.
Siete de los doce ministros de la máxima instancia judicial boliviana decidieron el viernes que Santa Cruz, un feudo derechista, asuma competencia para investigar al grupo, tres de cuyos miembros fueron muertos a tiros en abril pasado, cuando -según el Gobierno- planeaban el asesinato del presidente Morales y emprender una guerra secesionista.
"El Gobierno lamenta y rechaza vehementemente esta decisión que ha asumido la Corte Suprema de Justicia. Los siete ministros que han votado (...) tienen que saber que va a haber un juicio de responsabilidades por prevaricato", anunció el influyente viceministro de Coordinación, Wilfredo Chávez, citado este sábado por medios locales.
El Poder Ejecutivo duda de la justicia de Santa Cruz, porque teme que sus jueces diluyan la investigación que -de acuerdo con el oficialismo- prueba la relación de ricos empresarios de derecha de esta región con el grupo de mercenarios bolivianos, croatas y húngaros.
El Gobierno asegura que fueron precisamente algunos miembros de esa élite empresarial de derecha los que financiaron al grupo del boliviano-croata Eduardo Rózsa Flores, muerto a tiros en un hotel de Santa Cruz, junto a dos de sus compañeros.
La Corte Suprema de Justicia arguyó -según el diario La Razón- que la judicatura de Santa Cruz es la que debe conocer la causa, porque sus jueces fueron los primeros en conocer los hechos.
La Paz investigaba el caso, porque ahí el Poder Ejecutivo sentó las denuncias contra el grupo armado.