LONDRES.- Una semana y media después de su indulto, el ladrón del tren postal británico Ronnie Biggs, gravemente enfermo, dejó hoy el hospital.
Biggs, de 80 años, fue buscado por su hijo Michael en la clínica ubicada en Norwich, este de Inglaterra, donde se estaba recuperando de una grave infección de las vías respiratorias.
El tiempo que le quede de vida lo pasará en un hogar para ancianos en el norte de Londres, dijo el abogado del "ladrón del siglo", Giovanni Di Stefano, quien subrayó que su cliente aún está muy enfermo.
"Se siente lo suficientemente bien como para ser trasladado, y ésa será su última morada", dijo Di Stefano sobre el hogar.
El abogado defendió que los costos de los cuidados a Biggs las 24 horas sean pagados por los contribuyentes. "Eso no es ni más ni menos que lo que recibiría cualquiera que dispone sólo de medios limitados", afirmó.
El 8 de agosto de 1963, Biggs asaltó junto con una banda de ladrones el tren postal de Glasgow a Londres. Lograron huir con un botín de 2,6 millones de libras esterlinas (4,3 millones de dólares / 3,05 millones de euros).
Biggs fue condenado a 30 años de prisión, pero escapó y estuvo unos 35 años prófugo. Después de lograr escabullirse una y otra vez, tras sufrir un ataque de apoplejía, regresó voluntariamente al Reino Unido e ingresó inmediatamente en la cárcel. Sólo cumplió un tercio de su pena.