LIMA.- Las Fuerzas Armadas de Perú lograron rescatar hoy finalmente a los aproximadamente nueve militares que permanecían atrapados en medio de la selva, tras resultar heridos el miércoles en ataques del grupo maoísta Sendero Luminoso.
La operación se realizó con total hermetismo y de momento se desconocen detalles. Los heridos, de los que al parecer tres están en situación crítica, fueron trasladados en helicóptero a Lima.
Unos cuatro militares sufrieron heridas al ser emboscados en una zona del valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE). Los otros cinco las padecieron cuando el helicóptero en que intentaban el rescate de los primeros fue derribado por fuego enemigo.
En el derribo del helicóptero murieron los mayores de la Fuerza Aérea que oficiaban de piloto y copiloto, así como un suboficial de la misma institución.
El rescate se prolongó por cerca de 48 horas debido a las malas condiciones atmosféricas y al peligro que implicaba el acoso de los "narcoterroristas", como llaman las autoridades a la alianza entre Sendero y las bandas narcotraficantes.
Cada instante que pasaba era considerado como un peligro para los heridos, no sólo por su propia situación de salud, sino por el riesgo de que fueran atacados una vez más.
El VRAE, donde operan mafias del narcotráfico y el frente de Sendero que lidera Víctor Quispe Palomino, "José", se han convertido en el principal foco de riesgo para las Fuerzas Armadas peruanas, sin que se vislumbren salidas para el problema.
Sectores de oposición exigen las renuncias del ministro de Defensa, Rafael Rey, y del presidente del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general del Ejército Francisco Contreras, para que haya un costo político ante las supuestas negligencias que han permitido que la situación en el VRAE llegue a los niveles en que está.