WASHINGTON.- El ex secretario de Justicia del Gobierno de George W. Bush, John Ashcroft, podría ser enjuiciado por la detención abusiva de un testigo potencial en el marco de los atentados del 11 de septiembre, según estimó este viernes una Corte de Apelaciones federal estadounidense.
Un tribunal de San Francisco confirmó un fallo de 2006 que concierne a Abdulah Al-Kidd, un estadounidense arrestado en 2003 y retenido en prisión de alta seguridad durante 13 meses para ser utilizado como testigo en un proceso contra el sospechoso Sami Omar Al Hussayen.
Detenido el 16 de marzo de 2003 en el aeropuerto Dulles de Washington cuando se aprestaba a tomar un avión hacia Arabia Saudita, Abdulah Al-Kidd ya era objeto de vigilancia por parte de la policía federal (FBI), con la que él cooperaba.
Finalmente fue liberado sin cargos en su contra y jamás fue llamado a dar testimonio en el proceso de Sami Omar Al Hussayen.
Al-Kidd denunció que sus candidaturas para varios empleos potenciales son rechazadas debido a que su caso judicial permanece sin dilucidar. Su demanda va contra el uso de una ley promulgada después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 por iniciativa del secretario de Justicia de ese entonces, John Ashcroft, que permitía detener a eventuales testigos de manera preventiva.
"La detención de delincuentes, criminales y testigos es vital para prevenir, detener o retrasar nuevos ataques", declaró en aquel entonces el ex secretario Ashcroft en una conferencia de prensa.
John Ashcroft reclama inmunidad en este caso. "Los autores de nuestra Constitución habrían desaprobado el hecho de que un ciudadano estadounidense sea arrestado y detenido por ser nada más que un testigo", escribió el juez Milan Smith al dar su veredicto.
La organización de defensa de las libertades civiles, ACLU, parte civil en el proceso, se congratuló por la decisión judicial.
"La Corte dijo hoy muy claramente que el empleo por el ex secretario de Justicia Ashcroft de la ley sobre los testigos contraviene la Constitución", indicó la ACLU.