LA HAYA.- Argentina abre mañana en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) la primera ronda de audiencias públicas en el litigio que le enfrenta con Montevideo por la construcción de una planta de celulosa en la ribera uruguaya del río Uruguay.
Las audiencias empezarán a las 9.00 GMT y la delegación de Buenos Aires contará hasta las 13.00 horas 12.00 GMT empezará a exponer sus argumentos y Este horario se mantendrá hasta el próximo jueves.
Uruguay tomará la palabra el lunes 21 y acabará su presentación el jueves 24 de septiembre, cuando se dará por finalizada la primera ronda de las audiencias.
La segunda ronda, con turnos de dos jornadas por país, se iniciará el 28 de septiembre y se prolongará hasta el 2 de octubre.
Para prevenir posibles contagios de gripe AH1N1 durante las audiencias, la CIJ ha introducido medidas de ventilación e higiene especiales para la ocasión.
La fase escrita de este contencioso, cuando los países enfrentados presentan sus respectivas memorias con los argumentos principales de cada país, finalizó el pasado 29 de julio de 2008.
Argentina elevó el conflicto sobre las papeleras a la CIJ en mayo de 2006, con el argumento de que el país vecino violó el tratado del Río Uruguay, firmado en 1975, cuando autorizó la construcción de dos plantas de celulosa en su ribera del río que divide a ambos países.
Según Argentina, Uruguay no se sometió a los mecanismos de información y consulta del tratado en casos de actividades con posibilidades de contaminar el medio protegido.
El Estatuto del Río Uruguay prevé que la administración de los recursos del río debe ser conjunta entre Argentina y Uruguay.
En principio, estaba planeada la ubicación de dos plantas de celulosa, una de la finlandesa Botnia y otra de la española ENCE, pero la segunda decidió reubicar su fábrica en Uruguay en Punta Pereira, sobre la ribera uruguaya del Río de la Plata, para evitar problemas derivados del contencioso en La Haya.
El lugar está situado a unos 200 kilómetros al sur de Fray Bentos, destino original de la fábrica y donde se sigue construyendo la planta de la finlandesa Botnia.
Tanto Argentina como Uruguay solicitaron a la CIJ medidas cautelares que en los dos casos les fueron denegadas.
Argentina pedía que las obras de construcción de las papeleras se paralizaran hasta que el contencioso en La Haya llegase a su fin.
Uruguay pidió que el máximo órgano judicial de la ONU obligara a Argentina a paralizar los cortes de puentes internacionales que unen ambos países y cuya libre circulación está regularmente bloqueada en protesta por las obras de las celulosas.