BUENOS AIRES.- Un hospital de la periferia de Buenos Aires realizó con éxito la primera cirugía robótica para extirpar un cáncer de colón, informaron hoy fuentes del centro médico.
Fuentes del Hospital Federico Abete, de la localidad bonaerense de Malvinas Argentinas, confirmaron a Efe que la intervención mediante el uso del robot "Da Vinci", uno de los siete que hay en Latinoamérica, se realizó este viernes "con total éxito".
La operación, que duró unas cuatro horas, se realizó a una paciente de 68 años que tenía cáncer de colon.
"La cirugía se completó con técnica mínimamente invasiva con cinco puertos de trabajo, cuatro robóticos y uno para el asistente, sin necesidad de realizar una incisión accesoria, ya que la pieza operatoria se extrajo por el ano mediante una manga de aislamiento", explicó Rodolfo Ortega, director de Cirugía Robótica del hospital Abete, quien condujo la operación.
El hospital Abete ha adquirido dos robots "Da Vinci", a un costo de unos cinco millones de dólares por equipo, en tanto que el otro sistema de este tipo que hay en Argentina está en el Hospital Italiano, de Buenos Aires.
Operaciones como las realizadas este viernes tienen un costo de unos 20.000 dólares fuera de Argentina, país donde este tipo de intervenciones tendrá un valor de unos 8.000 dólares, aunque el municipio de Malvinas Argentinas determinó que no tenga costo alguno para aquellos pacientes que no tengan seguro de salud.
"Hay muy pocas experiencias de este tipo de intervenciones en el mundo y estamos orgullosos de poder utilizar tecnología de última generación para el cuidado de los habitantes de Malvinas Argentinas, al mismo tiempo que para el resto de los pacientes el costo será mucho menor al que se paga en el exterior", dijo el secretario de Salud del municipio, Hugo Schwab.
Una de las ventajas de este sistema es que es mínimamente invasivo, ya que se realiza una incisión milimétrica para introducir los brazos robóticos y el paciente no experimenta sufrimiento.
A través de un orificio de apenas unos cinco o seis milímetros, la cámara y los brazos quirúrgicos operan con total eficacia, dirigidos por el cirujano desde una consola de mando, con una visión exacta y movimientos de 360 grados dentro del cuerpo.
Además de la excelente visión que otorga el sistema, el robot elimina el movimiento de pulso y temblor natural de la mano humana.