NUEVA YORK.- Los embajadores latinoamericanos y europeos que abandonaron Tegucigalpa regresarán a Honduras para promover el diálogo y tratar de evitar una explosión social tras el regreso del presidente depuesto Manuel Zelaya, según informó el miércoles la Organización de Estados Americanos.
Lo importante ahora es evitar "el desbordamiento en la embajada de Brasil", donde se asiló Zelaya, declaró el canciller español Miguel Angel Moratinos, luego de una reunión con el secretario general de la OEA José Miguel Insulza.
En la reunión también se encontraban representantes de varios países latinoamericanos en la misión de España ante las Naciones Unidas.
"La situación es de enorme gravedad y queremos enviar un mensaje muy claro a las autoridades de facto de Honduras de que la comunidad internacional estará detrás del gobierno de Brasil, de la embajada, de la protección, de la seguridad, de la integrad", dijo Moratinos.