Chávez opinó que ahora ''huele a esperanza''.
EFENUEVA YORK.- El Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, bromeó hoy durante su mensaje ante la asamblea general de las Naciones Unidas asegurando que el podio desde donde pronuncian sus discursos los mandatarios "ya no huele a azufre".
Chávez logró gran repercusión en los medios norteamericanos cuando, en 2006, le tocó hablar ante la asamblea al día siguiente del mensaje del entonces presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
Al ponerse tras el atril, el Presidente venezolano hizo un gesto de disgusto y afirmó que olía a "azufre" y comparó a Bush con "el diablo". Las televisoras de Estados Unidos se cansaron de repetir el clip del presidente Chávez afirmando: "ayer el diablo estuvo aquí, huele a azufre todavía".
Pero hoy, ahora ya con el sucesor de Bush, Barack Obama, instalado en la Casa Blanca, Chávez aseguró que "ya no huele a azufre aquí, se fue" el olor.
"Huele a algo diferente, huele a esperanza", añadió Chávez, cuyo discurso fue emitido en partes por las emisoras todo noticias de la televisión de Estados Unidos.
Aunque lo criticó por mantener el embargo sobre Cuba y por, presuntamente, apoyar a los militares de su país que, aseguró, sabían del desarrollo del golpe en Honduras, Chávez tuvo palabras elogiosas para su nuevo colega estadounidense.
"Creo que Obama es un hombre inteligente", dijo Chávez, quien se declaró esperanzado con la posibilidad de que el mandatario norteamericano complete un "viraje" en las relaciones con América Latina.
El "show" de Chávez tuvo otros momentos divertidos, cuando interrumpió su discurso para saludar a un Presidente africano (a quien invitó desde el podio a pasar a saludarlo por la Isla Margarita) o a Patricia Rodas, la ministra de Exteriores del presidente hondureño destituido, Manuel Zelaya.
También aseguró que su discurso iba a ser menos extenso "que el de (Muammar) Khadafi", el líder libio que el miércoles habló durante una hora y media.
"Pero no voy a hablar menos que Obama, o que (el Presidente de Brasil, Luiz Inacio) Lula" da Silva, completó entre las risas de los diplomáticos en el auditorio.