LA PAZ.- Un enfrentamiento por tierras entre indígenas yuracarés y productores de coca se saldó con al menos un muerto y varios heridos en el sur del departamento amazónico de Beni, fronterizo con la región central de Cochabamba, informaron hoy los medios locales.
El choque se produjo en la tarde del sábado en el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) cuando los habitantes originarios de este lugar intentaron expulsar a los cultivadores de coca de la zona.
El viceministro boliviano de Régimen Interior, Marcos Farfán, informó a la agencia estatal ABI que los causantes del conflicto son cocaleros procedentes de El Chapare, en la región central de Cochabamba, que avasallaron el territorio indígena TIPNIS y comenzaron a sembrar la hoja de manera ilegal.
El Gobierno informó de la movilización de un contingente de 30 policías desde Cochabamba a la zona que lograron frenar los enfrentamientos.
Farfán y el vicepresidente de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), Pedro Nuny, coincidieron al señalar que, producto de este enfrentamiento, murió un indígena a causa de un impacto de bala y varios resultaron heridos.
Sin embargo, el comandante departamental de Policía de Cochabamba, coronel Carlos Quiroga, informó a Radio Erbol que el fallecido en el enfrentamiento es un productor de coca.
El dirigente de la CIDOB lamentó que el Gobierno, que ya conocía el conflicto por tierras en la zona, tardase en actuar.
Ante estas críticas, el viceministro de régimen interior aseguró que pese a que los cocaleros se asentaron en la reserva natural hace varios meses, entre dos y cuatro, el Gobierno sólo conoció el conflicto hace una semana, informó el periódico La Prensa.
Farfán indicó que entonces las autoridades gubernamentales convocaron a una reunión a los indígenas y se “iniciaron acciones inmediatas para retirar a los invasores y dar inicio a la erradicación de cultivos de coca.”
Finalmente, lamentó que "las condiciones de confrontación" se precipitasen antes de que el Gobierno pudiese actuar y adelantó que los "invasores" serán sometidos a procesos penales.
El TIPNIS es un área protegida de 1.096.000 hectáreas que el Estado tituló a favor de los indígenas y fue ocupada posteriormente por cuatro sindicatos cocaleros.
Según Radio Patujú, los indígenas rechazan la presencia de los colonos, a quienes acusan de deforestar el bosque y sembrar coca, que luego es destinada al narcotráfico.