WASHINGTON.- Un niño de 14 años acusó a su madre de haberlo encerrado durante cuatro años en un armario en el estado norteamericano de Oklahoma.
El adolescente está desnutrido, sucio y tiene numerosas cicatrices en su cuerpo, indicó la policía. El viernes pasado logró salir del armario y contactar a la Guardia Nacional. La policía detuvo a la madre, de 37 años, y a su pareja. Lo acusó de maltrato infantil y abandono.
Según la policía, el niño además tenía heridas por quemaduras. Agregó que el niño fue rociado con alcohol y le prendieron fuego. El joven indicó que permanecía amarrado la mayor parte del tiempo. Agregó que durante su encierro no pudo ir a la escuela y pasaba a oscuras en el armario.
"Todo su cuerpo está lleno de cicatrices", dijo un policía, "de pies a cabeza".
La víctima fue internada en un hospital para su tratamiento. Según el adolescente, la tortura comenzó cuando su madre fue liberada de la cárcel hace cuatro años y medio y se mudó a Oklahoma. La puerta del clóset solía estar bloqueda con objetos. Sin embargo, el viernes pasado logró abrir la puerta y huir.