TEGUCIGALPA.- La misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) que partió este jueves de Honduras sin lograr una salida a la crisis política pidió al Gobierno de facto autorizar un traslado del depuesto Presidente, Manuel Zelaya, de su refugio en la embajada de Brasil a un sitio "digno".
"Los cancilleres lo pidieron formalmente. Es una preocupación que se le dé un trato diferente, que esté en un lugar digno, en relación a su rango", afirmó el chileno John Biehl, asesor del secretario general de la OEA, José Miguel Insulza.
No obstante, Zelaya dijo a la prensa que el organismo lo que ha pedido es que se respete su integridad física, la de su esposa Xiomara Castro y de los seguidores con quienes se encuentra en la sede diplomática desde que regresó a Honduras clandestinamente el 21 de septiembre.
"Eso es lo que ha pedido la OEA, que se respete nuestra investidura, la vida. Estamos en condiciones bastante adversas, incluso durmiendo en el suelo y algunos sólo con colchonetas", manifestó Zelaya.
Zelaya agradeció al Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, la protección en la embajada y señaló que el régimen de facto está en la obligación de respetarle la vida.
El Gobierno de facto ha amenazado con detener a Zelaya si sale de la sede diplomática y entregarlo a la justicia para que enfrente acusaciones de corrupción, abuso de autoridad y traición a la patria, entre otros cargos que le imputa el régimen.
"Este traslado (de Zelaya solicitado por la OEA) sería a un lugar donde tenga mejores garantías y mayor seguridad. No sabemos la respuesta que van a dar", afirmó el líder sindical Juan Barahona, uno de los tres representantes de Zelaya en la mesa de negociación.
Una misión de cancilleres de la región, encabezada por el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, instaló el miércoles las conversaciones pero este jueves partió de Tegucigalpa sin lograr el acuerdo.