BRASILIA.- El relator especial de la ONU para el Derecho a la Alimentación, Olivier de Schutter, defendió este viernes a los Sin Tierra de Brasil, que viven un polémico momento por sus ocupaciones de haciendas, y llamó al país, un gigante mundial del agronegocio, a apoyar más la agricultura familiar.
"El MST (Movimiento de los Sin Tierra, el más organizado de Brasil, que lucha para dar tierras y medios a los desposeídos) está ahí para llamar la atención sobre las dificultades que muchos paíes enfrentan para alimentarse", dijo el relator en rueda de prensa.
Tras una visita de cinco días a Brasil, el relator llamó a conciliar la agricultura familiar con el agronegocio. "Los dos compiten por subisidios y apoyo político, pero la agricultura no está sólo para producir alimentos", tiene funciones sociales y medioambientales, afirmó.
Aunque elogió los esfuerzos del gobierno en distribuir tierras, sostuvo también que la concentración de la propiedad aumenta en el país sudamericano, y señaló que la plantación de caña de azúcar para producir el etanol combustible ha contribuido a esa concentración.
El etanol, según de Schutter, produce grandes áreas de monocultivo, contribuye a la concentración de la propiedad de la tierra y presenta condiciones de trabajo precarias, por lo que pidió que Brasil lidere una certificación internacional medioambiental y social para los biocombustibles.
El informe preliminar del relator destacó el empeño del gobierno del izquierdista Luiz Inacio Lula da Silva en la lucha contra el hambre, que consideró ejemplo internacional, y que ha rendido resultados de reducción de 73% de la desnutrición en el país sudamericano desde 2002 y de 45% en la mortalidad infantil, indicó.
Los programas de lucha contra la pobreza y el hambre llegan hoy a los 11 millones de familias que están bajo la línea de pobreza en Brasil (más de 45 millones de personas, o un cuarto de la población de 190 millones), según el gobierno.