HELSINKI.- El crucero más grande del mundo -con un anfiteatro, canchas de baloncesto y una pista de patinaje sobre hielo- inició hoy su viaje inaugural partiendo de un astillero en Finlandia con destino a Florida.
El llamado "Oasis of the Seas" tiene 16 pisos y mide 360 metros desde proa hasta popa. Sus 2.700 camarotes pueden acomodar a 6.300 pasajeros y una tripulación de 2.100 personas.
Comisionado por Royal Caribbean International, el buque costó 1.000 millones de euros (1,5 millones de dólares). Fue construido en dos años y medio en un astillero en Turku, al sudoeste de Finlandia.
El buque tiene cuatro piscinas, canchas de baloncesto y vóleibol, un parque de atracciones y guarderías para niños. También cuenta con una pista de hielo con capacidad para 780 espectadores y un pequeño campo de golf.
Tiene además varios "barrios": parques, plazas y espacios con diferentes ambientes. Uno de ellos será una zona tropical, con palmeras y plantas exóticas, que serán plantadas después de que el buque llegue a Fort Lauderdale.
La popa incluye un teatro de 750 asientos -inspirado en un antiguo anfiteatro griego- que se convierte en piscina durante el día y en escenario de noche. La piscina cuenta con una torre para saltar al agua con plataformas de 10 metros. Otro teatro interior puede acomodar a 1.300 personas.
Los camarotes del buque pueden llegar a medir 51 metros cuadrados con ventanas del suelo hasta el techo. También hay suites de 150 metros cuadrados con balcones que dan al mar o a paseos marítimos.
Uno de los "barrios", llamado Central Park como el célebre parque neoyorquino, destaca por una plaza con tiendas, restaurantes y bares, incluido el bar "Rising Tide" (marea ascendente). La compañía lo describe como "el primer bar marítimo en movimiento", ya que el establecimiento sube y desciende a lo largo de tres pisos, permitiendo a los clientes entrar y salir a distintos niveles.
Los ingenieros de la constructora STX Finland dijeron que el medio ambiente se tuvo en consideración a la hora de fabricar el buque, el cual no emite, renueva sus aguas residuales y consume un 25% menos de energía que cruceros más pequeños pero similares.