GINEBRA.- Fumar tabaco puede causar cáncer de colon, de recto y de ovario, según la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC).
"Nuevos estudios ofrecen suficientes pruebas para añadir el cáncer de colon, de recto y de ovario a la ya larga lista de cánceres causados por el tabaco", dijo la agencia, en un informe que corrobora y amplía las causas más comunes de los cánceres.
Añadió que el tabaco podría ser una de las causas que provocan el cáncer de mama.
Por otro lado, cuatro estudios recientes corroboraron que si uno de los padres fumaba antes de la concepción o durante la gestación del bebé, existe "un riesgo significativamente mayor de que el hijo sufra hepatoblastoma, un cáncer raro que se cree que es de origen fetal".
Además, un análisis de 11 estudios sugirió que el hecho de que uno de los padres fumara antes de la concepción del bebé, podría aumentar el riesgo del hijo de sufrir leucemia infantil.
En relación al tabaco sin humo, la agencia señaló que "ya se sabía que este producto causaba cáncer bucal y de páncreas, pero ahora hay suficientes pruebas de que también provoca cáncer de esófago".
Sin embargo, recordó que cientos de miles de personas son consumidores de tabaco sin humo, sobre todo en la India, el sureste de Asia, Suecia y Estados Unidos.
En el caso de los fumadores pasivos, la IACR afirmó que hay nuevos indicios que relacionan el humo del tabaco con el cáncer de laringe y faringe.
A pesar de que el consumo de tabaco es la principal causa de cáncer en el mundo, la agencia lamentó que en la actualidad existen más de mil millones de fumadores en todo el mundo.
Otra sustancia que se conocía que provocaba cáncer bucal es el betel, que es comúnmente mascado en India y el sureste de Asia.
No obstante, la IARC aseguró que hay pruebas suficientes que relacionan el consumo de este producto con el cáncer de esófago y que existen indicios de que podría provocar cáncer de hígado.
En materia de alimentación, la agencia destacó que "el pescado salado de la gastronomía china causa cáncer de nasofaringe y también podría provocar cáncer de estómago".
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer recordó que la composición del tabaco y del betel son altamente adictivos, y lamentó que "el marketing y determinados factores sociales influyen en los jóvenes para que empiecen esta adicción".
"La elección de comenzar a consumir estas sustancias se hace a menudo en la infancia y las sustancias adictivas obligan a su continuación", dijo la IARC.