Gorbachov, Walesa y Merkel cruzan el puente de la Bornholmer Strasse.
APBERLÍN.- La Canciller alemana, Angela Merkel, el ex líder sindical polaco Lech Walesa y el ex dirigente soviético Mijail Gorbachov cruzaron hoy un paso simbólico del Muro de Berlín, que hace 20 años fue abierto por primera vez, sin controles, a los alemanes del Este.
Bajo una llovizna persistente, Merkel cruzó muy sonriente con sus anfitriones y cientos de personas el puente de la Bornholmer Strasse, uno de los primeros pasos fronterizos abiertos en 1989, y decorado para la ocasión con grandes fotografías en blanco y negro sobre escenas de alborozo de entonces.
"No es un día de fiesta sólo para Alemania, sino para toda Europa y para las personas que tienen más libertad, desde Rusia hasta muchas partes del mundo", dijo la Canciller, vestida con una chaqueta de terciopelo azul marino.
Dirigiéndose a Gorbachov, Merkel declaró: "Ha dejado que las cosas pasaran, con valentía, y eso era más de lo que contábamos. Gracias de todo corazón".
La caída del Muro fue el "resultado de una larga historia de falta de libertad y de lucha contra esta falta de libertad. En Alemania, no fuimos los primeros pero estábamos allí cuando la Guerra Fría paró", añadió la Canciller, refiriéndose a los esfuerzos de Polonia y Hungría por liberarse del yugo comunista.
El sindicato Solidaridad fue "un increíble aliciente", dijo ante el ex Presidente polaco Lech Walesa, jefe de esa agrupación.
Miles de personas, algunas encaramadas en las vigas del puente y otras con niños sobre los hombros, no quisieron perderse el acto simbólico.
"Esa noche, crucé la frontera hacia el Oeste en automóvil. Era una locura. Circulábamos muy despacio por la gran cantidad de gente que había. Era extraordinario. Era muy curioso descubrir el Oeste y me sorprendió que fuese tan verde", recuerda Christel Schneider, una empleada bancaria de 62 años.
Las celebraciones de los 20 años de la caída del Muro comenzaron con un servicio religioso en la iglesia de Getsemani, símbolo de la disidencia de Berlín Este.
Los representantes de los 27 Estados miembros de la Unión Europea y de las cuatro potencias que ocuparon Alemania desde la derrota en 1945 hasta la reunificación en 1990 -Estados Unidos, Rusia, Gran Bretaña y Francia- se reunirán por la noche en la Puerta de Brandeburgo.
Este símbolo de Berlín se encontraba en la "tierra de nadie" del Muro construido en 1961 para impedir que los ciudadanos de la República Democrática de Alemania (RDA) cruzaran al Oeste.
Decenas de miles de curiosos recorren ya las calles de Berlín para asistir a los festejos.
Conciertos al aire libre, fuegos artificiales y una cadena humana marcarán la velada mientras los invitados de Merkel acuden a una cena de gala en la Cancillería.
La noche del 9 de noviembre de 1989 el mundo asistió atónito al espectáculo de miles de alemanes del Este que abrazaban a sus compatriotas del Oeste, después de que la RDA, bajo presión del pueblo, accediera a abrir los pasos fronterizos, algo con lo que no se contaba.