SEÚL.- El régimen comunista de Corea del Norte pidió hoy a Seúl que se disculpe por el enfrentamiento en aguas disputadas del Mar Occidental (Mar Amarillo) que causó serios daños a un patrullero norcoreano, informó la agencia surcoreana Yonhap.
Pyongyang consideró el incidente como "una grave provocación armada" por Seúl, que por su parte indicó que la nave norcoreana regresó a sus aguas "envuelta en llamas" tras el intercambio de disparos.
La agencia oficial norcoreana KCNA, citada por Yonhap, aseguró que su barco regresaba de una misión de reconocimiento cuando "un grupo de barcos de guerra de las fuerzas surcoreanas le dieron caza y cometieron la grave provocación de dispararle".
El Ministerio de Defensa en Seúl asegura que el patrullero norcoreano traspasó la línea marítima fronteriza, por lo que uno de sus buques hizo disparos de advertencia, a los que la otra parte respondió "atacando directamente".
La batalla, que duró unos dos minutos, supone el primer choque naval entre las dos Coreas en los últimos siete años.
El presidente surcoreano, Lee Myung-bak, convocó una reunión ministerial de emergencia tras el suceso, al tiempo que el primer ministro, Chung Un-chan, llamó a la calma y aseguró que se trató de un "enfrentamiento accidental".
En la frontera marítima en aguas del Mar Occidental se han producido en el pasado enfrentamientos con bajas entre buques de las dos Coreas, que mantienen una disputa acerca de la línea fronteriza.
Ésta fue establecida al término de la Guerra de Corea (1950-1953) por fuerzas de la ONU lideradas por EEUU, pero sin el consenso de Corea del Norte, que asegura que la frontera real se encuentra varios kilómetros más al sur de lo que marca la línea actual.